En Níjar, Rascafría, Mendaza, Horta de Sant Joan, Sierra del Áramo, La Alcobilla o Almodóvar del Campo, te puedes encontrar con uno de los árboles milenarios de la península, cuyas edades van desde los 800 hasta los 2.000 años.
Son árboles monumentales, singulares por su edad y cuentan con un gran surtido de imágenes en la red, dice Javier García Gimeno quien recopila la información de estos arcaicos vegetales y la comparte.
«Estos ancianos testigos de la historia nos hablan de épocas remotas. Han observado el desarrollo y la desaparición de civilizaciones, han sobrevivido a numerosas amenazas y cambios en su entorno y como auténticos guerreros han logrado permanecer hasta nuestros días», apunta el biólogo.
«Los árboles grandes no sólo poseen un indudable valor histórico sino que además tienen un gran valor ecológico, actuando ellos mismos como ecosistemas autónomos, albergando hasta 1.500 especies diferentes de seres que se desarrollan sobre ellos, produciendo grandes cantidades de oxígeno que purifican el aire y fijando toneladas de CO2 al año.»
Uno de los ejemplares a destacar es el Tejo Sierra del Pozo- Sierra Cazorla que se calcula es el más antiguo de Europa Occidental.